Seis sectores clave para invertir en Chile

Chile es un país con una economía estable y en crecimiento gracias a sus políticas macroeconómicas sólidas y a instituciones fuertes, según el Banco Mundial. Después de los desafíos que trajo la pandemia, Chile ha logrado recuperar el equilibrio económico y, en los últimos años, ha mantenido un crecimiento promedio del 2% anual. 

Chile es la quinta mayor economía de Latinoamérica y la de mayor ingreso per cápita de la región. También es un actor clave en distintas industrias. Según información del Ministerio de Relaciones Exteriores, el país es líder en la producción de cobre, litio y yodo, y destaca también en su exportación de productos agrícolas como uvas frescas, arándanos y cerezas.

En Sherlock Communications trabajamos de cerca con empresas de algunos de los sectores más prósperos de Chile, conocemos su estado actual y proyecciones para 2025. Esta es la primera publicación de una serie de insights que compartiremos próximamente. 

Micromovilidad: transporte más rápido, sostenible y popular 

El panorama de la micromovilidad en Chile en 2025 es de recuperación y expansión. Se proyecta un mayor número tanto de usuarios particulares como de quienes contratan a empresas de alquiler de scooters y bicicletas eléctricas. Estas empresas, que habían experimentado un auge en el uso de bicicletas tras la pandemia, vieron mermados sus ingresos drásticamente este año debido a la caída de la demanda.

Actualmente, la regulación del uso de bicicletas y scooters eléctricos en Chile es favorable, y las empresas que ofrecen estos servicios de arriendo se consolidan como una alternativa sostenible de transporte. 

Muchos chilenos y chilenas han adoptado estos medios como una opción habitual para viajes cortos. El interés por la micromovilidad responde a la necesidad de transporte urbano rápido y menos contaminante, lo que ha permitido que se consolide como un sector clave para la movilidad diaria en distintas ciudades.

Hacia 2025, se espera que la micromovilidad esté cada vez más integrada al sistema de transporte urbano, especialmente en ciudades como Santiago, donde los e-scooters y las bicicletas eléctricas se han establecido como alternativas para evitar la congestión vehicular en hora punta y reducir la huella de carbono. Según El Mostrador, esta opción es especialmente atractiva para estudiantes y trabajadores que buscan mayor flexibilidad en sus desplazamientos. 

En 2023, los e-scooters se posicionaron como el transporte urbano favorito en Santiago, especialmente para trayectos de última milla. Una de las principales empresas del sector registró más de 300,000 viajes en solo unos meses desde el inicio de su operación.

Actualmente dicha compañía tiene presencia en seis comunas de la Región Metropolitana y superó el millón de viajes en su primer año de operación, además de alcanzar la impresionante cifra de más de 3 millones de kilómetros recorridos en sus primeros doce meses. 

Según Movimentistas, Chile podría experimentar un aumento significativo en las iniciativas de infraestructura y en las políticas públicas orientadas a promover la micromovilidad, lo que consolidará esta opción como un medio de transporte accesible y eficiente para 2025.

Logística: integrada, tecnológica y sostenible

El mercado de logística en Latinoamérica tendrá un crecimiento significativo en los próximos años. Según el estudio de Statista “Valor del mercado de logística en América Latina entre 2019 y 2027”, se espera que este mercado alcance los 784.600 millones de dólares para 2027, con una tasa de crecimiento anual compuesto (CAGR) del 6,2% entre 2020 y 2027. Este auge estará impulsado por la mejora de infraestructuras, las iniciativas gubernamentales, el aumento del comercio internacional y otros factores sociopolíticos en la región.

Dentro de este contexto, la logística integrada está experimentando un crecimiento acelerado y se está posicionando como un actor clave en el futuro de la gestión de la cadena de suministro. Según Strategic Market Research, se prevé que el mercado global de logística integrada alcance los 77,52 mil millones de dólares para 2030. Este tipo de logística, que integra producción, almacenamiento, transporte y entrega de última milla, permite a las empresas reducir los plazos de entrega y minimizar interrupciones, mejorando la satisfacción del cliente y optimizando toda la cadena de suministro.

En Chile, el Gobierno dio un paso importante en la mejora de la infraestructura logística al lanzar oficialmente el proceso para crear una Política Nacional de Desarrollo Logístico Portuario. Esta busca sentar las bases de una planificación a largo plazo para los puertos, mejorando la eficiencia de la logística portuaria, su relación con el entorno social y ambiental,  contribuyendo al desarrollo económico del país.

De acuerdo con el Índice de Desempeño Logístico del Banco Mundial, Chile ocupa el tercer lugar en Latinoamérica, sólo detrás de Brasil y Panamá.  Esta herramienta, mide la eficiencia y efectividad de los sistemas logísticos de los países. A través de una escala del 1 al 5, evalúa seis componentes clave de la cadena de suministro. 

Además, el  35,90% de las empresas de logística en el país busca establecer  la calidad del servicio al cliente como el objetivo principal de su rendimiento, indica el estudio “State of Logistics 2024” (SOL24). 

Otra de las fortalezas del sector es el transporte adecuado de productos perecibles, como frutas y productos del mar. Los contenedores refrigerados o reefer juegan un papel fundamental en la cadena de suministro alimentaria al mantener una temperatura controlada durante el tránsito. Como exportador destacado de frutas y productos del mar, Chile hace uso extensivo de esta tecnología para cumplir con los protocolos fitosanitarios y garantizar el manejo óptimo de la cadena de frío. Los productos más beneficiados con esta tecnología incluyen cerezas, uvas, paltas, arándanos y salmón.

La tecnología reefer ha avanzado significativamente en las últimas dos décadas, incorporando innovaciones como la atmósfera controlada. Este método regula de manera precisa factores como el oxígeno, dióxido de carbono, nitrógeno, temperatura y humedad en los almacenes. Además, el tratamiento en frío es otra técnica especializada que ayuda a prevenir la propagación de plagas y enfermedades en frutas y verduras, mejorando la calidad y vida útil de los productos exportados.

Por otro lado, la visibilidad en tiempo real de las operaciones logísticas está cada vez más al alcance gracias al uso combinado de tecnologías como el Big Data, el Internet de las Cosas (IoT) y los gemelos digitales. Estas herramientas permiten a las empresas recopilar y analizar grandes volúmenes de datos, obteniendo una visión detallada y precisa de cada eslabón de la cadena de suministro. El 46,51% de las empresas locales asegura estar abierto a adoptar estas nuevas tecnologías para buscar oportunidades de mejora.