Conocida como la «Europa de América del Sur», la Argentina moderna cuenta con muchos rasgos italianos, españoles y de otros países europeos. Caminando por el centro de Buenos Aires, uno podría confundirse fácilmente con la fuerte influencia de la arquitectura europea, los bares bulliciosos y los lugareños vestidos a la moda, que se ven más europeos que sudamericanos. Amplias avenidas bordeadas de árboles conducen a una gran cantidad de museos, restaurantes y bares, donde los argentinos se reúnen para expresar los problemas del mundo.
El español es el idioma principal que se habla, con un fuerte acento casi gutural, pesado en los sonidos «j», mientras que todavía se hablan muchas lenguas indígenas en las partes más aisladas del país.
La cortesía, la etiqueta y la apariencia son muy importantes en Argentina, y los asuntos comerciales deben seguir un formato determinado. Los contactos son vitales y, a menudo, es tan importante quién hace las presentaciones como qué introducciones se hacen. Si bien los contactos argentinos pueden llegar tarde para las reuniones programadas, los invitados extranjeros no deberían replicar esta tendencia. Una agencia de relaciones públicas argentina bien ubicada con contactos de alto calibre asegurará que su negocio se encuentre en el nivel apropiado.